Después del revival de los grandes auriculares profesionales para escuchar dispositivos portátiles de música -cada vez más diminutos-, los fabricantes buscan el extremos opuesto: tamaño reducido, intensidad multiplicada. Empresas como Bose, Apple o Seenheiser están lanzando al marcado auriculares pequeños y adaptables que se colocan en el interior del oido: los in-ear earphones. Parecen audífonos, pero su funicón es exactamente la opuesta a corregir la sordera, consiguen aislar hasta en un 90% del ruido ambiental. Muchos de los modelos incluyen varias tallas de almohadillas de silicona para adaptarse completamente al oido. Unos de nuestros favoritos por su diseño y calidad de sonido son sin duda los auriculares in-ear de Bose.
Se ven bonitos, pero me parece que el aislamiento prolongado, y la falta de oxígeno en los oídos podría generar problemas a mediado plazo.
Según tengo entendido, y más aún si el sonido de la música es aún más directo e intenso.
hi!!!
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