Una nueva mancuerna de la ciencia y la gastronomía. Primero fue la cocina molecular, ahora tenemos nubes de sabor.
David Edwards, un científico y gastrónomo, trabajó junto con el diseñador culinario Marc Bretillot para inventar esta garrafa, “Le Whaf”, en la cual se preparan vapores que al ser inhalados llenan la boca de sabores. Esto se logra a través de un ultrasonido en la base de la garrafa que agita tan intesamente la comida, que le saca el sabor en una nube. Ésta despues se inhala para inundar las glándulas saboríparas y olfativas, del sabor. Se le ha llamado “La dieta Whaf”. La pregunta aquí sería: “¿Eso quitará el hambre?”. Porque más bien parece un sofisticadísimo y divertido juguete, pero con fines más bien de abrir el apetito.