La industria de lujo ha desembarcado con fuerza en México y las grandes marcas mundiales de moda han empezado a abrir sedes corporativas en el país. Según Hays, grupo líder internacional en reclutamiento profesional para puestos de mando medio y alta gerencia, esta reciente penetración de compañías del sector lujo en el mercado mexicano ha provocado una gran demanda de profesionales altamente calificados y con experiencia en posiciones como Senior Manager, coordinadores de ventas para red de tiendas, gerente de tienda y visual merchandising (caza tendencias), con salarios que pueden superar los 40.000 pesos mensuales. Profesionales a los que se les reclama experiencia en sectores afines y éxitos demostrables, con dominio de idiomas y formación en disciplinas como gestión de personal, el diseño de moda e industrial y distintas responsabilidades dentro de la industria textil.
Crecimiento acelerado
Actualmente, México es el mercado más importante de América Latina para las marcas de lujo, con ventas por encima de los 12.000 millones de dólares en 2012, con un crecimiento del 15%, superado sólo por los países de Asía – Pacífico, que crecieron 22% en el mismo periodo. Con menos barreras de entrada –tasas de importación- que Brasil, México es de facto la puerta de entrada a las marcas de lujo en América Latina, con una estimación de ventas para 2013 que sobrepasa los $14,000 millones de dólares.
Según diferentes estudios, más del 5% de la población mexicana tiene acceso a bienes de lujo, un porcentaje que seguirá creciendo “por dos grandes razones -señala Catarina Carvalho, responsable de la división de Marketing y Comercial de Hays México-, ya que el perfil socioeconómico al que se dirige tiene acceso al crédito y el crecimiento económico que está experimentando el país en los últimos años ha provocado que cada día más personas tengan acceso a este tipo de productos”.
El mexicano es un consumidor activo, indica Catarina Carvalho “la percepción del lujo ha cambiado en los últimos años, ha pasado de buscar una imagen basada en la apariencia a incorporar las grandes marcas a su vida cotidiana. Existe el anhelo del lujo y se busca la experiencia de compra. Se entiende el lujo como algo cada vez menos ostentoso, pero también más complejo, más sofisticado”.
México es el tercer mercado del lujo más importante dentro de las economías emergentes para las principales marcas globales “los mexicanos no han dejado de comprar productos de lujo a pesar de la recesión mundial –asegura Catarina Carvalho-, en paralelo la sociedad mexicana es muy receptiva a las nuevas marcas, lo que favorece las inversiones y la llegada de nuevas firmas de moda”
La entrada de nuevas marcas, la estabilidad de la economía, las características demográficas y las tendencias del mercado facilitan este crecimiento. “México tiene una situación demográfica excelente para la industria de lujo, con más de 40 millones de personas entre 25 y 50 años. Una franja de edad donde las personas son más productivas y su nivel de consumo es mayor”, concluye Carvalho.
Escasez de talento
“El crecimiento de la demanda no se corresponde con la actual disponibilidad de talento – señala Catarina Carvalho- y probablemente el mercado va a tener dificultades para cubrir estos puestos para los que se solicita experiencia y éxito demostrables en responsabilidades similares. Esta carencia provocará que muchas marcas importen este talento de otros país, lo que refuerza la necesidad de formar cuanto antes este tipo de perfiles profesionales”