El buen diseño es lúdico y atrevido. Por eso no extraña que muchas piezas icónicas resulten perfectas para la decoración de un cuarto de niños. Además, muchas de ellas se encuentran en tamaño infantil. ¿Qué tal decirle adiós a los clichés y sustituir la clásica mecedora por una fantástica silla colgante Bubble de Eero Aarnio? También podemos optar por una mecedora de Eames, que fue creada para las trabajadoras que se convertían en madres en la empresa de Charles & Ray Eames.
¿Por qué no invertir en un par de sillas Panton para niños, en la cuales además un adulto fácilmente se sienta de manera cómoda?
¿Qué tal decorar su habitación o cuarto de juegos con un icónico elefante de Eames, que además viene en muchos colores?
¿O que en lugar de un caballito, tengan un perrito de Aarnio? Las posibilidades son tan grandes como la imaginación, y el resultado, sin duda, será espectacular y de buen gusto.
