¿Sabías que los ácaros están en cualquier rincón del hogar donde se acumule polvo, y se reconocen como la fuente principal de alérgenos en interiores y uno de los peores enemigos para  nuestra salud en casa? A continuación, te compartimos información acerca de estos individuos y cómo eliminarlos.

Dentro de una casa, los ácaros tienen mayor presencia en almohadas, colchones, alfombras, muebles forrados con tela y artículos fabricados con peluche.

El momento que vivimos actualmente nos ha puesto en una situación en la que pasamos todo el día dentro de casa. La emergencia sanitaria por COVID-19 ha hecho que repensemos la forma en la que limpiamos nuestros espacios, a fin de evitar cualquier riesgo de contagio de esta u otras enfermedades y, de igual manera, transformarlos en hogares saludables, con un ambiente ideal para vivir.

Uno de los principales factores para tener un hogar saludable es tener la menor cantidad de polvo posible, ya que la presencia de éste significa, indudablemente, la presencia de ácaros. Estos organismos están en cualquier rincón del hogar donde se acumule polvo, y se reconoce a los ácaros domésticos como la fuente principal de alérgenos en interiores y uno de los peores enemigos para  nuestra salud en casa. Por ello es importante resolver algunas de las dudas que giran en torno de estos diminutos organismos. ¿Qué son? ¿Por qué aparecen? Y, sobre todo cómo evitarlos para prevenir algún padecimiento respiratorio. 

Lo primero que debemos saber es que los ácaros pertenecen a una familia de arácnidos de los cuáles existen casi 50,000 especies clasificadas de entre 100,000 y 500,000 aún desconocidas. La mayoría de estos organismos no son visibles al ojo humano y alcanzan entre 0.2 y 0.5 milímetros de longitud. Están distribuidos en todo el mundo y han podido adaptarse para vivir en todos los medios conocidos del planeta. El rango de temperatura para su reproducción es muy amplio, yendo desde los 5 a los 30 grados centígrados, siendo los 25º C la cifra óptima.

Dentro de una casa, los ácaros tienen mayor presencia en almohadas, colchones, alfombras, muebles forrados con tela y artículos fabricados con peluche. No obstante, se calcula que únicamente 25 de las especies identificadas de ácaros, están relacionadas con alergias en el ser humano. 

Otro punto importante a considerar es que los residuos fecales de los ácaros son los que poseen el mayor activo alergénico, y poseen la capacidad de ocasionar los síntomas de alguna enfermedad respiratoria, incluso tras la muerte del microorganismo. Adicionalmente, para que un grupo de ácaros domésticos produzca una alergia como el asma, la presencia de estos debe ser de entre 100 y 500 ácaros por gramo de polvo.

Frente a este contexto, sabemos que es posible evitar que los ácaros se conviertan en alergias, para ello existen medidas muy simples pero efectivas que se pueden aplicar en el hogar, ayudando a reducir significativamente el grado de exposición a estos alérgenos para quienes habitan una casa, entre las que mencionamos las siguientes:

• Eliminar del dormitorio y habitaciones todo tipo de acumuladores de polvo (alfombras, peluches, etc.)  
• Es recomendable utilizar fundas antiácaros para cubrir el colchón y las almohadas. Además, estos deben aspirarse una vez al mes durante 10 minutos y darles exposición a la luz solar al menos 2 o 3 veces al año durante 30 minutos. 
• La limpieza diaria de la vivienda es indispensable, sobre todo en estos momentos. Además de las habitaciones, retira todo el polvo de casa, de muebles y aparatos. Los ingenieros de Dyson han trabajado en aspiradoras como la V11, que incorpora el potente filtro HEPA y tecnología sin cables con la que limpiar cualquier rincón del hogar resulta en una tarea muy sencilla.
• Revisa periódicamente toda tu casa en busca de fallas que necesiten reparación, especialmente en en aquellas relacionadas con humedad. Reducir la humedad en casa o en las habitaciones por debajo del 50%, disminuirá significativamente la presencia de ácaros .

Invariablemente, los ácaros son habitantes incómodos en nuestro entorno y, aunque no son fatales, la acumulación de estos puede desencadenar situaciones adversas para la salud; sin embargo, con un continuo mantenimiento doméstico, sumado al uso de tecnología de última generación en eliminación de polvo y limpieza del aire, las alergias derivadas de ácaros serán cosa del pasado en los hogares, ya que con esto es muy simple erradicarlos y prevenir que se multipliquen. 

En tiempos de Coronavirus nos ha entrado un afán casi obsesivo de limpiar e higienizar ¡Todo! Lo cual ha provocado una escasez de este tipo de productos en los súper mercados. Esto ha llevado a más de uno a querer combinar más de un producto de limpieza para Ashby “eficientar” su poder sanitizante ¡Craso error! esto más que ayudar a mantener a salvo tu entorno, lo convierte en tóxico.

Cada producto de limpieza se elabora bajo estrictos controles de seguridad y para cumplir su función sin necesidad de mezclarlos. Por ejemplo el hipoclorito de sodio para usar en casa, está al 5%, sí lo mezclamos con algún ácido como limón, vinagre u otros productos de limpieza que con ácido clorhídrico, la sosa que contiene se neutraliza y además produce cloro gaseoso, que es altamente tóxico.

De acuerdo Carlos Antonio Rius Alonso, académico de la Facultad de Química (FQ) de la UNAM “el cloro es muy oxidante, produce quemaduras graves, paros respiratorios y afecta las mucosas de la nariz, boca y pulmón”.

El alcohol es otra de las sustancias que no debe mezclarse con cloro, pues al combinarlos se obtiene cloroformo, compuesto químico que detiene el diafragma, principal músculo encargado de la respiración, lo que podría causar un paro respiratorio. Además las cloraminas y el cloroformo son sustancias que tienen hepatotoxicidad y se ha comprobado que son cancerígenas; seguramente la afectación no se presentará de inmediato, pero su uso continuo tendrá un efecto acumulativo y a largo plazo generará problemas como cáncer de hígado.

Un producto más que no debe ser mezclado es el agua oxigenada, pues junto con el cloro forma cloratos o percloratos, que son utilizados en la fabricación de explosivos. Al combinarse formarán cloratos y por reacción exotérmica, que genera calor, podría haber una explosión. 

Tampoco mezcles agua oxigenada con vinagre pues también puede ser explosiva, al oxidarse el ácido acético, se obtiene ácido peracético, utilizado en reacciones de polimerización por lo que debe ser manejado con extremo cuidado.

Con qué limpiar

Afortunadamente las proteínas que rodean al Coronavirus son sensibles al simple jabón de manos o cualquier otro que  tengas en casa. Así que una mezcla de janón líquido es suficiente para lavar tus manos,  limpiar puertas y paredes.

El alcohol diluido al 70% también podría ser efectivo, pero tiene el inconveniente de que a largo plazo, al eliminar la grasa de las manos puede generar problemas como dermatitis y si se te resecan en demasía, son una entrada para otros bacterias, levaduras u otros patógenos, que nos van a provocar otro tipo de problemas más graves. 

¿Cómo funciona el cloro?

En su estado natural es un gas, y comprimido se vuelve líquido; para que pueda disolverse en agua se utiliza una solución alcalina con hidróxido de sodio o sosa y se forma el hipoclorito de sodio que es altamente volátil y tóxico.